{"id":173,"date":"2007-06-25T07:57:57","date_gmt":"2007-06-25T07:57:57","guid":{"rendered":"http:\/\/theantipode.com\/annyaboglio\/?p=173"},"modified":"2016-09-05T01:21:58","modified_gmt":"2016-09-05T04:21:58","slug":"derechos-animales-el-enfoque-abolicionista","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/anyaboglio.com\/derechos-animales-el-enfoque-abolicionista\/","title":{"rendered":"Derechos animales: el enfoque abolicionista"},"content":{"rendered":"

\"ciervo-any-aboglio\"<\/a>Elabolicionismo reclama al presente la necesidad de una clara definici\u00f3n del t\u00e9rmino para entender su importancia en cuanto al otorgamiento de derechos a los animales. Intento prevenir un posible mal uso, a trav\u00e9s de versiones amplificadas o ambiguas, preservando el concepto para no regalar la palabra.<\/p>\n

El abolicionismo rechaza la condici\u00f3n de propiedad de los animales no humanos. Encara un punto de partida diferente del que habitualmente se considera para la defensa animal,\u00a0posibilitando un nuevo y eficaz marco te\u00f3rico para el an\u00e1lisis de la realidad<\/strong>. Gracias al mismo, podemos comenzar a formular nuevas preguntas en vez de seguir asistiendo a la ineficacia de buscar m\u00e1s respuestas para las preguntas de siempre, pudiendo abordar as\u00ed nuevas perspectivas. Se lo juzga de \u201cextremo\u201d. En realidad, s\u00f3lo lo parece. Lo verdaderamente extremo es el grado de opresi\u00f3n y utilizaci\u00f3n que hacemos de los no humanos, apropi\u00e1ndonos de sus vidas en innumerables y espantosas maneras.
\n
\nEn la teor\u00eda de los Derechos Animales del profesor Gary L. Francione, el t\u00e9rmino abolicionismo es precisado por el autor al referirse a las medidas incrementales que es posible adoptar en materia legal, con v\u00edas a suprimir la condici\u00f3n de propiedad de los no humanos. A estas medidas, si bien las considera dentro del objetivo abolicionista\u00a0 \u2013y opuestas, por lo tanto, a la reforma bienestarista que apunta a seguir utilizando no humanos como recursos\u2013, prefiere llamarlas \u201cprohibiciones\u201d, para que no haya confusi\u00f3n con el objetivo final a largo plazo, cual es la abolici\u00f3n de la propiedad sobre los animales no humanos.\u00a0[1] Los criterios que puntualiza para considerar a estas prohibiciones como parte de un cambio incremental hacia la abolici\u00f3n, son para comenzar, y no para finalizar el tratamiento de este tema. Lo que es indiscutible es la diferencia entre las mismas y la reforma bienestarista, \u00fatil para quienes adscriben a la postura filos\u00f3fica del bienestar animal, que son quienes en definitiva la han formulado, y que fomentan desde organizaciones\u00a0ad hoc<\/em>, Colegios de Veterinarios, organizaciones neobienestaristas, dise\u00f1adoras de mataderos al estilo Temple Grandin, industrias explotadoras o entidades proteccionistas que \u201cs\u00f3lo se dedican a los animales sin hogar\u201d. De esta manera, el abolicionismo rechaza las campa\u00f1as y los proyectos legales bienestaristas en cualquier caso, sin importar qui\u00e9nes los sustenten, porque s\u00f3lo reclaman un cambio en el trato que se les da a los animales no humanos, sin cuestionar la utilizaci\u00f3n en s\u00ed de los mismos. La reforma, introduciendo supuestas mejoras, va en contra del proyecto abolicionista porque sirve a los intereses de la propiedad de los explotadores. Por eso es que ellos la aceptan, en su caso. Estas reformas no est\u00e1n hechas para ayudar a que los animales no humanos salgan paulatinamente del control de quienes los explotan. Tampoco evitan m\u00e1s y renovadas formas de explotaci\u00f3n.<\/p>\n

En este sentido el abolicionismo est\u00e1 emparentado, por ejemplo, con el movimiento contra la esclavitud a la que institucionalmente estuvieron sometidos los pueblos de ascendencia africana. Los mismos fueron considerados propiedad de los blancos, siendo comercializados principalmente con el objetivo de servir de mano de obra y sirvientes de los amos conquistadores y explotadores del Nuevo Mundo. Eric Williams considera que el origen de la esclavitud del negro fue econ\u00f3mico y no racial: se habr\u00eda originado en la necesidad del bajo costo de la mano de obra y no en el color del trabajador, siendo el racismo una racionalizaci\u00f3n posterior para justificar la opresi\u00f3n de otros seres humanos. [2] Como fuere, el \u201ccomplejo de superioridad\u201d que cultiv\u00f3 el racismo, basado en caracter\u00edsticas biol\u00f3gicas y hereditarias se\u00f1aladas como signos de inferioridad \u2013y no de diferenciaci\u00f3n\u2013, del grupo dominado, sostuvo y perpetu\u00f3 el sistema incluso despu\u00e9s de que fuera abolido. La violencia deviene end\u00e9mica en el control de las posesiones animales que tienen ese imperioso impulso de escapar, revelando que la esclavitud es algo m\u00e1s que un problema econ\u00f3mico. Por andenes similares transitan racismo y especismo.\u00a0Es que las cosas no son cosas: son siempre cosas \u201cde alguien.\u201d <\/strong>Y en esta sociedad, ese \u201calguien\u201d puede poseer a estas \u201ccosas\u201d, tanto para sacarlas a dar una vuelta por el parque como para convertirlas en un rentable cad\u00e1ver.\u00a0[3]<\/p>\n

La ideolog\u00eda del Bienestar Animal, que orienta y explica la regulaci\u00f3n de las actividades que explotan a los no humanos como recursos, se proyecta operativamente en la aplicaci\u00f3n normativa. Pero con el comienzo de cada d\u00eda, sigue habiendo v\u00edctimas y verdugos en los mataderos, productos y consumidores en los negocios, libres y esclavos en las creencias. El ser sensible \u201cprotegido\u201d \u2013en terminolog\u00eda de la normativa bienestarista\u2013, sigue siendo materia prima para producir jam\u00f3n, queso o cuerpos para experimentaci\u00f3n. Sigue degradado a los l\u00edmites de la jaula o el recinto. El accionar humano conforme a esta norma no ha cambiado en un \u00e1pice el desprecio por la vida no humana violentada. El p\u00fablico contin\u00faa consumi\u00e9ndolos con la convicci\u00f3n de que hay organizaciones que luchan para que los traten bien o no se extingan, y colabora poniendo la firma que se le solicita si los animales \u201cle importan\u201d.<\/p>\n

En 1996 Francione escrib\u00eda lo que va a repetir en enero del 2007 en una entrevista para VeganFreak\u00a0<\/em>[4]: en este momento de la historia de la relaci\u00f3n de los humanos con los otros animales, los activistas no deber\u00edan usar sus recursos para tratar de conseguir cambios legislativos pro-abolici\u00f3n. Y es que la medida incremental deber\u00eda reunir criterios muy dif\u00edciles de alcanzar. Estos son\u00a0[5]:<\/p>\n

    \n
  1. Debe constituir una prohibici\u00f3n.<\/li>\n
  2. La actividad prohibida debe ser parte integrante de una instituci\u00f3n explotadora, constituyendo una actividad de la misma.<\/li>\n
  3. La prohibici\u00f3n debe reconocer y respetar un inter\u00e9s no institucional del animal. Esto es un inter\u00e9s real de individuo y no uno de su propietario para explotarlo.<\/li>\n
  4. Los intereses de los animales no pueden negociarse. Significa que debe prevalecer aunque no hacerlo suponga beneficios para los humanos.<\/li>\n
  5. La prohibici\u00f3n no deber\u00eda sustituirse por una forma de explotaci\u00f3n alternativa y supuestamente m\u00e1s \u201chumanitaria\u00bb.<\/li>\n<\/ol>\n

    No s\u00f3lo estos criterios son dif\u00edciles de reunir sino que tambi\u00e9n son dif\u00edciles de exigir en una campa\u00f1a, estando tan arraigada la idea de propiedad sobre el ser sintiente no humano. Francione considera que se necesita que toda la energ\u00eda disponible sea volcada en sembrar un cambio de paradigma centrado en el rechazo al uso y explotaci\u00f3n de los animales no humanos, para construir un movimiento social y pol\u00edtico que posibilite alcanzar esas prohibiciones rumbo a la abolici\u00f3n de la esclavitud. Esto conducir\u00eda a la adopci\u00f3n del veganismo como aplicaci\u00f3n del abolicionismo en la vida diaria.<\/p>\n

    Necesitamos percibir los profundos lazos que existen entre la explotaci\u00f3n animal, la econom\u00eda y la sociedad en s\u00ed misma, en momento de absoluta crisis ambiental cuyas causas \u00faltimas se asientan en la idea de dominio sobre la naturaleza y de separaci\u00f3n entre el humano y el resto de la animalidad no humana para justificar su opresi\u00f3n. Un cambio de actitud en las personas generar\u00e1 un cambio significativo en la condici\u00f3n que hoy padecen millones de no humanos. En este sentido\u00a0el veganismo es una actitud de respeto hacia toda la vida animal no humana sintiente que implica un modo de vida donde se evita voluntariamente su uso, su consumo o la participaci\u00f3n en actividades derivadas de su esclavitud, explotaci\u00f3n y muerte.\u00a0Es la l\u00f3gica consecuencia de una mirada no instrumental de los no humanos, que los reviste con valor intr\u00ednseco. Y es la manera en que boicoteamos a toda la industria de explotaci\u00f3n de animales.<\/strong><\/p>\n

    El movimiento por los derechos de los animales reci\u00e9n comienza. El abolicionismo cuestiona la servidumbre y propone en la pr\u00e1ctica una transformaci\u00f3n real en la relaci\u00f3n con los animales no humanos. Como abolicionistas, nuestra tarea consistir\u00e1 en crear a diario este movimiento a trav\u00e9s de miles de movimientos locales libres de contradicciones y repletos de recetas antiespecistas: todas 100% vegetarianas.<\/p>\n


    \nNotas<\/strong>
    \n
    \n<\/cite><\/em>[1]<\/cite> Francione, Gary L., \u201cRain without Thunder. The Ideology of the Animal Rights Movement\u201d, Temple University Press, 1996.
    \n[2] Williams, Eric E.,\u00a0Capitalism and Slavery, New York, 1966.
    \n[3] Ver las relaciones de las leyes bienestaristas con el resto del entramado jur\u00eddico y socioecon\u00f3mico en: Aboglio, Ana Mar\u00eda, enero de 2005,
    El liberacionismo y la actual sociedad esclavista.\u00a0Decir y hacer hoy para acortar el tiempo de la cosecha. <\/a>
    \n[4] Entrevista de\u00a0VeganFreak, disponible en:
    http:\/\/www.abolitionistapproach.com\/media\/mp3\/veganfreak-radio-2007-02-05.mp3<\/a>
    \n[5] \u00cddem nota 1.\u00a0Recordar as\u00edmismo el ep\u00edgrafe elegido para este libro: \u00abSi no hay lucha, no hay progreso. Aqu\u00e9llos que dicen defender la libertad sin mover a la agitaci\u00f3n… quieren lluvia sin truenos ni rel\u00e1mpagos.\u00bb Frederick Douglass.<\/cite><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

    Elabolicionismo reclama al presente la necesidad de una clara definici\u00f3n del t\u00e9rmino para entender su importancia en cuanto al otorgamiento de derechos a los animales. Intento prevenir un posible mal uso, a trav\u00e9s de versiones amplificadas o ambiguas, preservando el concepto para no regalar la palabra. El abolicionismo rechaza la condici\u00f3n de propiedad de los […]<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":1941,"comment_status":"closed","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"site-sidebar-layout":"default","site-content-layout":"","ast-site-content-layout":"","site-content-style":"default","site-sidebar-style":"default","ast-global-header-display":"","ast-banner-title-visibility":"","ast-main-header-display":"","ast-hfb-above-header-display":"","ast-hfb-below-header-display":"","ast-hfb-mobile-header-display":"","site-post-title":"","ast-breadcrumbs-content":"","ast-featured-img":"","footer-sml-layout":"","theme-transparent-header-meta":"","adv-header-id-meta":"","stick-header-meta":"","header-above-stick-meta":"","header-main-stick-meta":"","header-below-stick-meta":"","astra-migrate-meta-layouts":"default","ast-page-background-enabled":"default","ast-page-background-meta":{"desktop":{"background-color":"var(--ast-global-color-4)","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""},"tablet":{"background-color":"","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""},"mobile":{"background-color":"","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""}},"ast-content-background-meta":{"desktop":{"background-color":"var(--ast-global-color-5)","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""},"tablet":{"background-color":"var(--ast-global-color-5)","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""},"mobile":{"background-color":"var(--ast-global-color-5)","background-image":"","background-repeat":"repeat","background-position":"center center","background-size":"auto","background-attachment":"scroll","background-type":"","background-media":"","overlay-type":"","overlay-color":"","overlay-gradient":""}},"jetpack_post_was_ever_published":false,"_jetpack_newsletter_access":"","_jetpack_dont_email_post_to_subs":false,"_jetpack_newsletter_tier_id":0,"_jetpack_memberships_contains_paywalled_content":false,"_jetpack_memberships_contains_paid_content":false,"footnotes":"","jetpack_publicize_message":"","jetpack_publicize_feature_enabled":true,"jetpack_social_post_already_shared":false,"jetpack_social_options":{"image_generator_settings":{"template":"highway","enabled":false}}},"categories":[5],"tags":[27,42,21,46,25,20,26,38,28,31,33],"jetpack_publicize_connections":[],"jetpack_sharing_enabled":true,"jetpack_featured_media_url":"https:\/\/i0.wp.com\/anyaboglio.com\/wp-content\/uploads\/2007\/06\/ciervo-any-aboglio.jpg?fit=640%2C495&ssl=1","_links":{"self":[{"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/173"}],"collection":[{"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/2"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=173"}],"version-history":[{"count":14,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/173\/revisions"}],"predecessor-version":[{"id":2430,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/173\/revisions\/2430"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/media\/1941"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=173"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=173"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/anyaboglio.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=173"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}